Este libro lo descubrí por casualidad en la pagina www.bajalibros.com donde he comprado algunos ebooks (pocos) y que generalmente por semana presentan algún libro gratis.
Resumen del libro:
Un barco se
hundió en el Caribe. El único sobreviviente, un tripulante argentino,
logró mantenerse aferrado a una silla de madera que apenas flotaba en la
inmensidad del océano. Pronto descubrió que empezaba a ser rodeado por
varias aletas de tiburones. Paralizado por el miedo, dirigió su
pensamiento a Dios, suplicando una y mil veces por un milagroso rescate.
Y el Señor se apiadó de él. Le envió un barco para que lo sacara de las
aguas y lo llevase de regreso a su Buenos Aires querido. Y no sólo eso.
Dios quiso compensar tanto sufrimiento y lo proveyó de un nuevo trabajo
en la seguridad de un banco, como administrativo.
Al año siguiente,
Dios fue a visitar al muchacho para ver cómo se estaba desempeñando,
aunque, para Su sorpresa, lo encontró sumamente angustiado.
'No te entiendo', le dijo el Señor. 'Te rescaté de una muerte horrible.
Te hice contratar por un banco serio, trabajás en un lindo escritorio,
aire acondicionado, una rutina que no te provoca estrés y la posibilidad
de ir ascendiendo con los años de acuerdo a tus méritos.
¿Se puede saber qué te pasa ahora?'.
El muchacho miró a Dios para responder con cierta melancolía: 'Es que
extraño a los tiburones'.
Cómo ser argentino sin usar chaleco de fuerza pretende ser una mirada
crítica a los grandes 'defectos' de los que hacemos gala buena parte de
los argentinos. La soberbia, el narcisismo, la omnipotencia, la
manipulación, el exitismo, la corrupción, la intemperancia. Se trata de
un diminuto libro de diálogos y cuentos, combinados con la maravillosa
ilustración gráfica de mi gran amigo Maicas.
Son una serie de diálogos que nos pinta de curpo entero. Es un libro pequeño, alcanza las 40 páginas, pero vale la pena leerlo.
En la introducción, el autor explica que hizo este libro porque tiene la convicción de que la sociedad puede cambiar para mejor.
Consejo: Imperdible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario